Ir al contenido principal

Una nueva conciencia


A lo largo de la vida siempre hay momentos en los que te preguntas para qué estas aquí, si realmente tiene un sentido o simplemente has de admitir que hay un tiempo lineal que te marca tu nacimiento y tu muerte y te sometes a la banal interpretación que la sociedad materialista te inculca desde muy pequeño.

Llega un momento en la vida, en el que te planteas realmente si existe un propósito, si existe algo más. La vida te da la maravillosa posibilidad de experimentar, de sentir, de evolucionar y de crecer. Pero en una sociedad que se alimenta de números de DNI, eslabones o engranajes para que un mundo material funcione, esa evolución o crecimiento te lo plantean a nivel material. No solo en el aspecto de tener, que a la sociedad de consumo ya le va bien. Sino también en el aspecto de competitividad, la individualidad ha de competir con ser mejor que el otro, en cualquier aspecto su su vida.



¿Y a donde nos lleva esta mentalidad?
Al más absoluto fracaso y frustración.
Desde niños nos castran los sueños, las ilusiones, la inocencia, la creatividad.
Nos van convirtiendo en auténticos rebaños en los que no faltan además las ovejas negras, esas víctimas a las que el convencimiento de su incapacidad les ha quedado marcado desde niños y a lo largo de sometimientos posteriores ya sea a través de relaciones personales, laborales o de cualquier otro tipo.

En esa competitividad, se ha inculcado el juzgar, el culpar, el someter, el buscar siempre en el exterior
nuestras propias carencias, haciéndonos olvidar que todo absolutamente todo, está en nosotros mismos. Que nuestra vida es solo el resultado de nuestros pensamientos y de nuestras acciones desde la auténtica intención.

En un mundo material, en el que todo se compra y todo se vende, van llegando las frustraciones cuando
nos damos cuenta que no se puede comprar el amor, que no se puede comprar la ilusión, y que por muy bien que te vayan las cosas, y por muchos lujos que puedas comprar, en el momento de tu muerte, todo va a quedar aquí.

¿Se puede vivir con esta mentalidad?
Se puede pasar por la vida, sin vivir.
Porque vivir, es experimentar, en cada uno de los momentos de tu vida,  es ese instante irrepetible, no hay pasado, que no es más que un recuerdo, ni hay futuro que es un quizá. Solo puedes vivir la experiencia en cada momento, porque es donde ves, hueles, sientes, tocas, te emocionas, oyes y ríes, o lloras. Ese instante en el que todos tus sentidos están percibiendo. Pero también cuando comprendes que todas esas experiencias son para algo, y ese algo tiene que ver con la evolución de tu alma, es cuando comienzas a tomar conciencia de que la vida aquí te brinda una maravillosa oportunidad de experimentar, crecer y evolucionar desde tu Ser.

Los seres humanos nos hemos convertido en los mayores depredadores de la Madre Tierra, la sociedad de consumo está desafiando a las leyes naturales creyendo que podemos controlarlo todo, sin tomar conciencia de que por mucho que desequilibremos el Orden Natural, éste volverá a reequilibrarse. Las catástrofes Naturales no son sino consecuencia de ese reequilibrio natural, y simplemente las vemos como algo externo a nosotros, cuando nosotros también formamos parte de ello.

Hay un mundo sutil, un mundo que funciona exactamente igual que el mundo denso que percibimos, en el que tal y como dice "El Kybalion" "Lo de arriba es lo de abajo".
Pero en ese mundo sutil, no tiene cabida la manipulación, es una dimensión en la que simplemente con la intención de cada uno, en cada uno de sus actos  ya comienza a moverse sin esperar a la acción en sí. Por eso muchas veces no comprendemos el resultado de nuestra vida. La acción puede manipularse y "venderse" de mil formas, pero la intención real es la impronta que mueve la energía en esa dimensión,
y a partir de ahí comienzan a materializarse los resultados.

No podemos engañarnos a nosotros mismos, y cuando comprendamos que lo que proyectamos hacia el exterior, el universo nos lo devuelve multiplicado por tres, comenzaremos a tomar conciencia de que Todo está en continuo movimiento y nosotros formamos parte de ese Todo. Lo que vemos y lo que no.

Existe un Universo tan infinito hacia el exterior como hacia el interior. Macrocosmos y microcosmos, y con cualquier modificación que hagamos en nosotros mismos, ya estaremos variando los resultados en el exterior. Desde el amor o desde el odio, eso es ya el libre albedrío, con una gran diferencia, que el amor, sana, y el odio mata. Manifestándose de muchas maneras. Pero todo empieza por la Fe, no desde el punto de vista religioso, ya que cualquier dogma también impide la evolución de tu alma, sino la Fe en ese Orden Divino, partiendo de que cada uno de nosotros es una Divinidad, y formamos parte de un Todo también Divino.

Muestra Respeto, Humildad, Comprensión y Agradecimiento desde la intención y la impronta que dejes en ese mundo sutil te devolverá el mismo Respeto, Humildad, Comprensión y Agradecimiento en todas las facetas de tu vida. Crea tu propia vida bajo estos parámetros y comprobarás los resultados. Para ello tendrás seguramente que enfrentarte a todas tus sombras, reconocerlas, aceptarlas y agradecer el servicio que hayan podido dar a tu Ego, porque es el Ego el que ha necesitado refugiarse en ellas, pero tu Ser no las necesita. A partir de ahí transmutarlas y renacer de nuevo con otra conciencia.

Con esa nueva conciencia ya no te preguntarás "por qué" te pasan las cosas que te vayan sucediendo, sino "para qué". Y a partir de ahí podrás ser consciente de tu propia evolución y tu alma encontrará su propósito de vida.

La propia energía que generes te alejará de muchas personas que seguramente intenten ridiculizar tu nueva forma de comprender la vida, no intentes convencerles de nada, tampoco lo van a entender, eso ya es un trabajo personal suyo, no lo hagas tuyo, simplemente te alejas. Pero también te brindará la oportunidad de acercarte a otras que sintonizan contigo y con quienes sea por un instante, un periodo de tiempo o el resto de tu vida, compartirás experiencias de crecimiento y evolución, que no podrás explicar, porque simplemente hay que vivirlo.

Entradas populares de este blog

El camino del soy yo al yo soy

Nos pasamos, a ñ os, algunos quiz á toda la vida... Buscando... Buscando siempre en el exterior esa chispa, esa energ í a, ese algo que permita llenar nuestros vac í os... Porque hemos aprendido a que hay que vivir en plenitud. Pero que es la plenitud sino un vac í o de ti mismo? Porque solo desde un vac í o puedes volver a llenar. Aprendemos a cubrir los vac í os f í sicos teniendo, poseyendo todo lo que se ofrece en el exterior. Aprendemos a cubrir los vac í os emocionales, teniendo pareja, amigos, hijos, pero lo aprendemos desde la posesi ó n, sin comprender que nada nos pertenece. Aprendemos a cubrir los vac í os mentales apegados al pasado y preocupados por el futuro  sin ocuparnos del presente, sin permitirnos vivir el aqu í y el ahora que es el ú nico momento en el podemos sentir plenamente. Intentamos conseguir prestigio, admiraci ó n, aceptaci ó n desde la apariencia externa, sin comprender que eres tu el primero que lo tienes que tener hacia ti, sin la neces...

Amar, sentir, vivir aquí y ahora

A lo largo de la vida, desde la personalidad, siempre hay momentos en los que te preguntas para qué estas aquí, si realmente tiene un sentido o simplemente has de admitir que hay un tiempo lineal que te marca tu nacimiento y tu muerte y te sometes a la banal interpretación que una sociedad, que un sistema basado en lo material, te inculca desde muy pequeño. Llega un momento en la vida, en el que te planteas realmente si existe un propósito, si existe algo más. La vida te da la maravillosa posibilidad de experimentar, de sentir, de evolucionar y de crecer. Pero en un sistema que se alimenta de números de DNI, eslabones o engranajes para que un mundo material funcione, esa evolución o crecimiento te lo plantean a nivel material. No solo en el aspecto de tener, que a la sociedad de consumo ya le va bien. Sino también en el aspecto de competitividad, la individualidad ha de competir con ser mejor que el otro, en cualquier aspecto su su vida. ¿Y a donde nos lleva esta mentalida...

Feliz año 2014, dirige tu carro

Ha terminado un año importante, el 2013 el año del amor. Hacer un repaso de lo vivido, es una forma de reconocerte en todas tus acciones, en tu entorno y en cualquiera de las parcelas que hoy representan tu vida. Puedo afirmar que hoy, una de esas parcelas es la que comparto con una persona, un alma, que entre otras muchas cosas me ha mostrado las diferentes caras con las que podemos reconocernos en el amor. Hoy vibramos y compartimos este camino juntos, pero si mañana no lo hiciésemos, sólo podría tener agradecimiento hacia ella, por todo cuanto hasta hoy hemos compartido y por todo lo que hoy siento con ella.